La depresión afecta a más de 3 millones de personas en Francia en la actualidad con cerca de 300 000 que vivían con forma crónica. Según los estudios, del 10 al 25% de las mujeres y 12.5% de los hombres en riesgo de depresión mayor durante su vida.Si las causas de la depresión son muchos, el estrés, sería importante. Los neuropsiquiatras estiman que aproximadamente uno de cada cinco personas experimentará al menos un episodio depresivo en su vida bajo la presión de stress1. Por otra parte, según un reciente estudio2, el estrés laboral podría precipitar la aparición de trastornos psicológicos en individuos previamente sanos.El estrés y la depresión: cómo explicar este vínculo?Cuando una persona está sujeta a las situaciones diarias y estresante intenso, que produce las hormonas de un cuasi-continuas (adrenalina y cortisol). La producción excesiva de estas hormonas tiene un efecto adverso sobre el sistema nervioso: el exceso de cortisol (debido a estado de tensión repetida) se bloqueará el crecimiento de nuevas neuronas en el hipocampo, la región del cerebro conocida para actuar en el estado de ánimo. El cortisol también impiden la comunicación entre las neuronas mediante el bloqueo de los receptores estimulados por la serotonina, una molécula implicada en los trastornos del humor. Un proceso que, a largo plazo, podría conducir a la depresión.
El estrés y la depresión: las señales de advertenciaSi usted está bajo estrés considerable, aquí están algunos de los síntomas indicativos de un cambio hacia una posible depresión:
Estado general de la fatiga, mal humor;Los cambios de humor y repentinos accesos de llanto;Preocupación, la ansiedad, el pánico;Dolor de cabeza, disminución de la libido;La amnesia, dificultad para concentrarse, indecisión;Frecuente ausencia del lugar de trabajo, reducción de la productividad;Sensación de agobio, pérdida de sentido del humor.Otros efectos nocivos del estrésEl estrés puede causar fatiga, dolores de cabeza, trastornos del sueño ... También puede afectar el sistema digestivo (estreñimiento, espasmos, distensión abdominal). Finalmente, el estrés también puede perturbar el funcionamiento de la glándula tiroides, disminuyendo la resistencia del sistema inmune y causar reacciones alérgicas. Sus efectos sobre la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares han sabido de largo.